Exploradores emergentes: Alexandra Cousteau

Su legendario abuelo, Jacques, y padre, Philippe, exploraron las maravillas de los océanos del mundo.

Defensora social y medioambiental
Su legendario abuelo, Jacques, y padre, Philippe, exploraron las maravillas de los océanos del mundo. Pero, hoy, Alexandra Cousteau explora nuevas maneras de salvarlos. «Creo que el agua será la crisis definitiva de nuestro siglo, el vehículo principal a través del cual el cambio climático se sentirá -desde sequías, tormentas e inundaciones a la degradación de la calidad del agua. Veremos importantes conflictos sobre el agua; refugiados de agua. Habitamos un planeta de agua y, a menos de que lo protejamos, administremos y reestablezcamos el recurso, el futuro será un país muy diferente al que imaginamos hoy en día».

«La gente -dice Cousteau- ha creado el problema. Por lo que es de suma importancia lograr que el público se emocione y tenga muchas ganas de participar en la solución. Una sociedad sustentable sólo llegará a través de acciones acumuladas de millones de individuos, lo cual significa un reto enorme».

De acuerdo a Cousteau, «No se logra el reto con sólo decirle a la gente que haga algo. Los datos y cifras entran por un oído y salen por el otro. La conciencia no lleva a la acción. En vez, necesitamos explorar las tendencias en cultura popular, la interactividad, y el marketing social para entender por qué cosas como redes sociales, los juegos de video y el fútbol fantasía tienen tanto éxito. El movimiento medioambiental de hoy en día trabaja principalmente con herramientas de baja tecnología y de bajo impacto. Todavía no nos hemos dirigido al público de forma inspiradora y atractiva. Estoy trabajando para implementar herramientas de comunicación de tecnología de punta que realmente son relevantes en las vidas de las personas».

La última iniciativa de Cousteau, Water Quest, llevará la tecnología y la participación del público a un nuevo nivel, y juntará datos de todo el mundo acerca de la calidad del agua sobre plataformas de mapeo. «También se expondrán datos sobre problemas sociales, económicos, políticos, medioambientales y de salud -explica-, y se actualizarán constantemente mientras científicos, profesores, gobiernos e individuos agregan información por medio de un forum abierto. La tecnología remitirá y conectará todos los datos para mostrar cómo la calidad de agua impacta a la sociedad de diferentes maneras. Todos, no sólo los científicos, pueden observar e informar acerca de la calidad del agua en su propia comunidad. A través del tiempo, podemos usar esto para pronosticar tendencias en la escasez del agua e informar a quienes toman las decisiones y a los administradores de recursos. Ayudará a democratizar el proceso de administración del agua y convertirnos todos en gente que sabe resolver problemas de modo proactivo».

Cousteau investiga otras formas de estimular a la gente a que tome acción a través de EarthEcho International, organización no lucrativa que cofundó con su hermano Philippe. El grupo explora nuevas oportunidades mediáticas y sociedades entre grupos diversos y provee una plataforma para líderes medioambientales emergentes.

Estos esfuerzos tienen como eje central el poder de la narración. «Evolucionamos como especies cuentistas -señala Cousteau-. Pero la comunidad ambiental no ha apalancado este enfoque. Al convertir las cuestiones y la información en algo personal, en historias relevantes, podemos involucrar a la gente de manera mucho más efectiva. Es por eso que mi abuelo fue tan exitoso. No era un oceanógrafo, era un extraordinario narrador».

Encontrar nuevas formas y lugares innovadores para contar esas historias es otra meta de EarthEcho. Conciertos donde las bandas transmitan mensajes importantes, juegos de video acerca del agua y el clima, simulaciones en línea que muestren la causa y el efecto de las opciones de administración de recursos, y mensajes de texto que ayuden a la gente a tomar decisiones sustentables mientras ordenan de un menú de restaurante son sólo algunas de las nuevas posibilidades y vías que Cousteau explora.

¿Es inevitable la participación con el medio ambiente si se nace con el apellido Cousteau? «Mi padre y mi abuelo fueron dos grandes inspiraciones -reconoce-. Pero mi pasión es propia, no un negocio familiar que heredé. El mejor ejemplo que me dieron fue la importancia de vivir una vida de consecuencia, valor y significado. Es por eso que, mientras honro su legado, no sigo sus pasos. Estoy creando los míos».