Guía recomendada para recorrer Cracovia, antigua capital de Polonia y hermosa urbe medieval.
Cracovia, antigua capital de Polonia, se mueve en una atmósfera que, aunque pasen los siglos, sigue siendo medieval.
Sus calles empedradas remiten a tiempos anteriores, las torres recargadas de la Basílica de Santa María son como las atalayas de un palacio principesco, y el constante ir y venir de los coches a caballo completa la escena en los alrededores del Castillo de Wawel, una estructura gigante ubicada en el punto más alto de la ciudad, a orillas del río Vístula -el mismo que atraviesa Varsovia-, solemne residencia real hasta el siglo XVII, hoy museo histórico, mirador privilegiado y límite urbano del Old Town.
Al seguir caminando por la calle Stradomska se ubica Kazimierz, el distrito convertido en gueto judío tras la conquista de Polonia en la Segunda Guerra Mundial (no dejes de pasar por The Old Synagogue y la Isaac’s Synagogue).
VISITA: La dama del armiño, de Leonardo da Vinci, expuesta en el Museo Czartoryski (muzeum-czartoryskich.krakow.pl).
HOSPÉDATE: en las casas de huéspedes de la Universidad Jagiellonian (dg.uj.edu.pl/florianska).
COME: en Babci Malliny (calle Slawkowska 17), restaurante de comida tradicional que se mantiene la usanza comunista, sin mesoneros ni detalles excesivos.
IDA Y VUELTA: PKP (rozklad-pkp.pl) ofrece conexión en tren Cracovia-Minsk. Si buscas algo más económico, toma la ruta Cracovia-Terespol. Si cruzas la frontera a pie llegas a Brest, ahí compra el boleto hasta Minsk. Con la misma compañía se puede ir de Cracovia a Lublin, y allí tomar bus hasta Brest (150 kilómetros).
Si prefieres hacer todo el recorrido en autobús, te será útil visitar autokarpolska.com.pl (sólo está en polaco), que cubre el trayecto Cracovia- Varsovia, y Varsovia-Brest.