Seguimos nuestra travesía ahora por la Isla de Tierra del Fuego, encontrando un increíble santuario de pingüinos.
Desembarcamos en la mítica Isla de Tierra del Fuego por medio del puerto de Porvenir, del lado Chileno de la isla y pronto comenzamos a avanzar rumbo a la llamada Bahía Inútil. El terreno insular inmediatamente presenta un paisaje desolado, la población es mínima y la vegetación apenas se asoma en el frío viento.
Nos perdimos un poco entre el pueblo de Cameron y Onaisin, pero finalmente encontramos la entrada al Parque Pingüino Rey, el único santuario fuera de la Antártida donde esta ave habita libremente. Desde la entrada no parece haber señales de vida, pero poco a poco se distinguen las siluetas blancas y negras a lo lejos. Nos recibieron un par de especialistas en pingüinos muy entusiastas quienes nos explicaron el funcionamiento del lugar y como los pingüinos llevaban apenas unos cuantos años migrando a este lugar desde la Antártida, comportamiento nunca antes visto. También nos platicaron cómo cada año la población crece en este pequeño santuario.
No esta permitido acercarse a menos de 20 metros, pero como los animales andan libres por el lugar, éstos se acercan a los visitantes por su propia curiosidad. El lugar está extremadamente aislado, por lo que estuvimos solos con los pingüinos por mas de una hora, paseando por un pequeño riachuelo que hace una especie de estuario donde viven las aves. Su comportamiento parece errático, pero en algunos momentos tienen una gracia sin igual, sobretodo cuando se zambullen en el agua a nadar. También es curioso escuchar sus graznidos y llamados, con los que parecen comunicarse a todo momento.
Al terminar este safari austral volvimos al camino y recorrimos el tramo hasta la linea divisoria con Argentina. Este terreno fue disputado en los 70 entre los dos países, cuando casi estalló el conflicto armado, pero ahora reina la paz.
Una vez del otro lado de la frontera tomamos fuerzas en un agradable albergue del Automóvil Club Argentino y nos preparamos para nuestro último tramo hasta Ushuaia, el fin del mundo.