En estos hospedajes alternativos, las vivencias de tu viaje se intercalarán con las rarezas de un hotel que jamás habías imaginado.
De Diseñador
No sólo las ciudades o paisajes más imponentes harán de tu viaje una experiencia inigualable. Hoy día los diseñadores, arquitectos y artistas plásticos más innovadores trasladan el concepto de la hotelería a una experiencia de vida, donde los lugares más sorprendentes se acondicionan para recrear habitaciones y espacios originales.
Una casa en medio del lago
Utter inn, Suecia. El artista sueco Mikael Grenberg fue el encargado de diseñar este singular hotel construido sobre la superficie del lago Mälaren de la ciudad de Västeras, a 100 kilómetros al oeste de Estocolmo. La cabaña en medio del agua cuenta, además de la estancia, con una habitación sumergida, la cual tiene cristaleras para que los huéspedes puedan recrearse con la flora y fauna a modo de acuario.
El check in se realiza en el puerto de la ciudad, desde donde el personal del hotel se encargará de llevar a los huéspedes en barco hasta el alojamiento, ubicado aproximadamente a un kilómetro. Incluye, además, bote privado, para conservar la independencia, pero con recursos.
La modalidad de reserva Deluxe incluye diariamente la limpieza de la habitación y la comida. También existe la modalidad Bohéme, con el puro alojamiento. Los precios oscilan entre 250 y 350 dólares por noche. Permanece cerrado durante los meses de invierno. Tel. (46) 2110-3830. (www.mikaelgenberg.com)
Nueve horas para revivir
9 Hours, Japón. En una céntrica ubicación de la ciudad de Kioto se localiza esta útil opción de hospedaje que por un precio inferior a los hoteles convencionales ofrece a los clientes nueve horas para hacer uso de una cápsula-dormitorio.
Durante más de tres años, Fumie Shibata, del estudio japonés Design Studio S, aportó diseño, minimalismo, calidad y confortabilidad al popular formato asiático del fast-hotel u hotel cápsula.
El edificio consta de nueve plantas divididas en zonas para hombres y mujeres, que a la vez se dividen en salas públicas de aseo con vestuarios, duchas y áreas de relajación. Cuenta con otra área privada donde organizadamente se localizan los 125 dormitorios-cápsulas de plástico reforzado inspirados en las ventanas y cabinas de los aviones.
Las camas tienen sábanas de hilo y la habitación dispone de todos los servicios para descansar como: televisión, radio, despertador, luz regulable y un sistema de luz computarizado para despertar al huésped a la hora programada. Además, el hotel ofrece todos los elementos básicos de higiene como champú, acondicionador, cepillo de dientes, toallas, pantuflas, colonia y agua mineral. Respetando las características de un alojamiento de cuatro estrellas.
La filosofía del hospedaje juega con la funcionalidad. Los espacios, los servicios y los precios se adaptan a los huéspedes. Para lograr una máxima organización el hotel recomienda aprovechar la estancia de la siguiente forma: una hora para ducharse, siete horas para dormir y una hora de relajación y preparación.
Abierto todo el año. El precio por nueve horas es de 4,900 yenes, 59 dólares aproximadamente. (www.9hours.jp)
Dormir en el parque
Das Park Hotel, Austria. Este extravagante alojamiento alternativo se localiza a 190 kilómetros de Viena, en el Rodlpark, el parque principal de Ottensheim, a orillas del río Danubio. Cuenta únicamente con tres habitaciones que sorprendentemente se localizan en tubos de drenaje emplazados sobre el pasto.
El artista Andreas Strauss es el responsable del proyecto, que con la finalidad de crear un alojamiento innovador para los turistas, diseñó el interior de los bloques de hormigón adaptando una confortable cama doble, una lámpara, una mesa, un baúl, conexión a Internet y respiraderos que hacen la función de ventanas en cada uno de ellos.
La ideología del hotel es que los huéspedes tengan una experiencia única al visitar la ciudad, ya que además de la original estancia podrán disfrutar de un paseo en barco por el Danubio o de la música de los conciertos que se suelen organizar en el parque los fines de semana.
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No hay tarifas establecidas. Cada huésped deja el dinero que considera necesario por pasar la noche en este lugar. No cuenta con servicios de aseo o restaurante, pero los clientes pueden hacer uso de los espacios públicos del parque para asearse y comer. También dispone de un sitio seguro para almacenar el equipaje y recargar los dispositivos electrónicos.
Abre de mayo a octubre y se puede reservar a través de la página web donde se obtendrá una clave de acceso que se activa a las 15 horas del día de la llegada y se desactiva a las 12 horas del día de la salida. (www.dasparkhotel.net)
Soñar en las nubes
Jumbo Stay, Suecia. Pasar la noche en un avión no tiene que ser incómodo, sobre todo si se trata de un Boeing 747 de 1976 anclado en tierra. Este curioso alojamiento que se localiza en el aeropuerto Arlanda, ubicado a 42 kilómetros al norte de Estocolmo, dispone de 27 habitaciones de diferentes categorías. Cada una cuenta con televisión de pantalla plana y baño privado o compartido.
Algunas habitaciones tienen acceso a una plataforma de observación en el ala izquierda, mientras que la suite, ubicada en la cabina del Jumbo Stay. La opción más adecuada para dormir dentro de un avión en pleno aeropuerto de Arlanda-Estocolmo.
Sus servicios son de primera clase. avión, ofrece una vista panorámica del aeropuerto. Servicios: transporte gratuito en autobús hasta el aeropuerto, conexión inalámbrica a Internet gratis, toallas, limpieza de las habitaciones y desayuno. Es posible adquirir bebidas y snacks, y hay un horno de microondas. Aunque el espacio se reduce a un avión, es una opción cómoda e ideal para quien tenga un vuelo muy temprano: las puertas de embarque están enfrente.
Los precios por noche varían entre los 50 y 300 dólares, dependiendo del tipo de habitación. (www.jumbostay.com)