¿Los tranvías como el transporte del pasado o del futuro?
Se le puede echar la culpa a Blanche Dubois, el caso es que a veces los tranvías son catalogados como medio de transporte anticuado. No le digas eso a los planificadores urbanos de Seattle, Tacoma y otras ciudades donde a los tranvías se les están dando papeles protagónicos.
«Hay una creciente necesidad de opciones de circulación de alta calidad dentro de los centros de las ciudades», dice Ethan Melone, director de trenes urbanos del creciente sistema de Seattle.
Los tranvías que toman electricidad de los rieles o de líneas que corren por encima, pero que comparte los carriles de tránsito con otros vehículos, cubren esa necesidad. La eficiencia no es lo único que importa, dice Patrick Condon, autor de Seven Rules for Sustainable Communities.
«Si hemos de tener éxito alguna vez en cortar los gases de efecto invernadero, necesitamos dejar los viajes en coche y declararnos a favor de opciones libres de emisiones de estos gases, como caminar, moverse en bicicleta y usar el transporte público», dice.
Por su historia y parte escénica, los favoritos de Condon son el sistema de Toronto, que data del siglo diecinueve, y el modelo de Portland, Oregón, que convirtió zonas abandonadas en vecindarios de moda.
Nuevas líneas en Tucson, San Luis y Washington D.C., serán inauguradas en 2014 y habrían de revivir a los tranvías como la manera frecuente de viajar.