Este es uno de los tianguis indígenas con mayor convocatoria.
A 30 kilómetros de la capital oaxaqueña se ubica Tlacolula, un pueblo famoso por albergar el tianguis indígena con mayor convocatoria de los Valles Centrales desde tiempo prehispánicos.
Cada domingo, las calles se hacen peatonales y se llenan de canastos con todo lo imaginable: textiles, utensilios para el hogar, artesanías, jícaras, herramientas para el campo, frutas, verduras y el infaltable pan de yema.
Las lenguas se escuchan por doquier: zapoteco, triqui, chinanteco, amuzgo, mixe y otras que pertenecen a las 16 etnias de la región. Vendedores de comunidades remotas de la sierra bajan a la fiesta. Visten sus mejores atuendos que ayudan a reconocer su procedencia por los colores y el diseño que traen.
Las mujeres de Tlacolula parecen gitanas, con sus blusas y faldas floreadas, trenzas largas y pañuelos de seda de colores alrededor de la cabeza, a veces adornados con monedas.
Encuentra la historia completa en la edición de enero/febrero (2017) de la revista National Geographic Traveler.