Nunca perder la capacidad de asombro y el espíritu aventurero
Casi todo es una aventura. A veces sólo cruzar una frontera, de un país o de un barrio, te convierte en aventurero. El elemento más importante de cualquier aventura es lo inesperado. Para poder viajar con espíritu aventurero tienes que dejar ir un poco la planeación y tener la libertad de sorprenderte. En esta edición te compartimos cuatro grandes aventuras. Un viaje extremo por el Congo en busca de los gorilas lomo plateado, para convivir con las familias y los guardianes del bosque que los cuidan.
Una de las naciones más nuevas del Pacífico, Timor Oriental es un destino inusual, pocos han visitado esta pequeña isla paradisiaca. En el otro extremo está el caso del safari andino, uno de los viajes más socorridos por la élite viajera del mundo. Siete días de caminata a través de los Andes que te lleva al mítico desierto de Atacama, está repleta de asados, buen vino y muchas anécdotas. Finalmente, una aventura más cercana ahí donde añoramos estar muchas veces, junto al mar y con nosotros mismos: con la excusa de rescatar una vespa, en huatulco, una pareja pasa unos días de sol, mar y juguetes acuáticos. Te proponemos viajes para viajeros más o menos atrevidos, ideales para destrabar los límites de tu vida diaria.