La escena en Sudáfrica es muy inusual, afirma un biólogo.
Un programador y ciclista aficionado, radicado en Suiza, hizo el recorrido de su vida el viernes pasado, al compartir la carretera con un avestruz salvaje.
En el video GoPro del encuentro, ?puedes oírme reír en mi bicicleta ?dice Oleksiy Mishchenko, residente de Zúrich y empleado de Google-. Creí que iba a caerme?.
Mishchenko fue a Sudáfrica a tomar una semana de vacaciones, y a participar en el recorrido ciclista Cape Argus Tour. El viernes 4 de marzo, él y unos amigos fueron hasta el Cabo de Buena Esperanza, en el extremo sur del Continente Negro. El camino estaba desierto.
De reojo, Mishchenko vio un par de avestruces a un lado del camino, un macho (con plumas más oscuras) y una hembra (de plumaje más claro). De pronto, el macho saltó al camino y comenzó a perseguir a los amigos de Mishchenko, mientras este filmaba la ?carrera? desde atrás.
Mishchenko dice que, aunque los ciclistas pedaleaban cuesta abajo a una velocidad de unos 50 kilómetros por hora, el ave corredora no tuvo problema para seguirles el paso, pues algunas de sus congéneres han superado los 70 kilómetros por hora.
?Nunca se me ocurrió que pudiera ser una amenaza ?dice Mishchenko-. Aquel muchachón parecía completamente tranquilo. No me pareció que estuviera asustado, porque no trató de cambiar de dirección o escapar?.
A la larga, el avestruz salió del camino y los ciclistas terminaron su recorrido hasta el cabo. Al regresar, vieron al ave parada junto a la carretera. Mishchenko agrega que hay una granja de avestruces en el área, aunque dice que la grabación fue hecha dentro de los límites del Parque Nacional Table Mountain.
Conducta inusual
?Jamás había visto algo así?, comenta el biólogo Craig Packer, explorador National Geographic y profesor de la Universidad de Minnesota, quien estudia animales salvajes africanos.
?Nunca había visto personas en bicicleta cerca de avestruces ?agrega Packer, quien ha tomado acercamientos de las aves para su proyecto ?Serengeti Selfie?-. Es imposible saber en qué estaría pensado ese pájaro?.
Como la cara del animal no es visible en el video, es difícil adivinar sus intenciones. Packer señala que no actúa de manera agresiva, porque no embiste a los ciclistas. De modo que tal vez los confundió con avestruces hembras, o simplemente quedó ?atrapado en el tráfico?. En ocasiones, los animales siguen el flujo de vehículos o personas durante un tiempo, incapaces de elegir un lugar seguro para salir del camino, como a veces ocurre a los conductores adolescentes.
?Quizás trataba de impresionar a su novia?, sugiere Mishchenko.
Eso también es posible, reconoce Packer, aunque esas aves normalmente intentan impresionar a sus parejas sacudiendo las alas de manera intermitente y emitiendo un sonido retumbante, cosas que no se observan en el video.
?Lo que sucede es desconcertante?, concluye Packer.
La población de avestruces aún es muy abundante en África, aunque estos animales suelen recelar de las personas.