Este triste récord se alcanza debido a la disminución del hielo marino, asegura un estudio.
Un oso polar hembra nadó nueve días, recorriendo 687 kilómetros de agua, equivalente a la distancia entre Washington, DC, y Boston, según un nuevo estudio. Sin duda, esta ‘hazaña’ se convierte en un récord difícil de vencer… pero no es para sentirse orgullosos.
El depredador hizo su épico viaje en el mar de Beaufort, al norte de Alaska, donde el hielo marino se está reduciendo debido al calentamiento global, obligando a las osas madre a nadar distancias cada vez mayores para llegar a tierra, con esto ponen en riesgo a sus cachorros.
Por ejemplo, el cachorro de la osa que ‘instauró’ este ‘récord’, murió en algún punto entre el comienzo del ‘viaje’ y la siguiente vez que los investigadores la observaron en tierra. Ella también perdió un 22 por ciento de su peso corporal.
«Estamos bastante seguros de que estos animales nunca antes tuvieron que hacer estos impresionantes viajes antes, porque 687 kilómetros de aguas abiertas no ocurrió muy a menudo en la historia evolutiva de los osos polares», dijo el coautor del estudio, Steven Amstrup, jefe científico del grupo de conservación Polar Bears International.
Amstrup es también el anterior líder de proyecto de investigación de osos polares para el Servicio Geológico de EE.UU. (USGS), que dirigió el estudio.
Hay datos en el estudio de que otra osa nadó por más de 12 días, pero parece haber encontrado lugares para descansar durante su viaje.