Un estudio aplicado a ratones demostró que la actividad de los teléfonos celulares cerca de hembras preñadas puede provocar déficit de atención.
Según un estudio aplicado a ratones por la Escuela de Medicina de Yale, exponerse a la radiación de una llamada por celular mientras se está embarazada podría afectar el desarrollo del cerebro del feto, además de conllevar potencialmente a la hiperactividad, entre otros desordenes del comportamiento.
Los resultados fueron publicados el 15 de marzo en Scientific Reports, una publicación de Nature.
Según el autor líder de la investigación, Dr. Hugh S. Taylor, profesor en jefe de la División de Endocrinología Reproductiva y Fertilidad en el departamento de Obstetra, Ginecología y Ciencias Reproductivas de la Universidad de Yale, esta es la primera evidencia experimental de que la exposición fetal frente a la radiación de celulares sí afecta en el comportamiento de adulto.
Taylor, junto con los coautores del estudio, expuso a ratones embarazados a la radiación de un celular posicionado sobre la jaula y que emitía llamadas telefónicas de manera constante. Un mismo grupo control de ratones preñados fue expuesto a las mismas condiciones pero con el celular desactivado. El equipo midió la actividad cerebral de ratones adultos que fueron expuestos a la radiación en su etapa fetal, además de operar un control de pruebas psicológicas y de comportamiento.
Se comprobó que los ratones expuestos a la radiación tendían a ser más hiperactivos y presentaban una pérdida en sus capacidades de memoria. Taylor atribuyó este comportamiento a un defecto en el desarrollo neuronal en la corteza pre frontal del cerebro durante el embarazo.
El Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), es un desorden asociado a una neuropatología localizada principalmente en la corteza pre frontal, y se caracteriza por la hiperactividad y distracción en el paciente.
«Hemos mostrado que los problemas de comportamiento en los ratones asociados al TDAH son causados por la exposición a teléfonos celulares durante su etapa fetal» sostuvo Taylor a Nature. «La presencia de desordenes de comportamiento en niños humanos puede ser en parte a la exposición fetal de la radiación de teléfonos celulares».
Según Taylor, esta investigación podría ayudar a que las personas comprendan mejor los mecanismos detrás de estos desordenes para establecer limites seguros durante el embarazo.
El estudio se realizó mediante fondos del Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano Eunice Kennedy Shriver.
Fuente: ScienceDaily.com