¿Por qué no vemos la curva de la Tierra?

Los humanos no podemos percibir a simple vista la curva de la Tierra. La realidad es que solo alcanzamos a ver una porción muy pequeña de la superficie.

El planeta que habitamos no es redondo, es más bien una esfera ligeramente ovalada aunque a simple vista no podemos ver la curva de la Tierra. Cuando tomamos una fotografía frente al mar, en el horizonte observamos una línea recta, lo que ha llevado a muchos a creer que nuestro planeta es plano

Desde hace más 2.000 años, sabemos que la Tierra es redonda, el astrónomo y matemático Eratóstenes fue el primero en calcular su circunferencia, mucho antes de que existieran los satélites y de que el hombre viajara al espacio y pudiéramos conocer las hermosas fotografías del planeta azul.

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¿Por qué no vemos la curva de la Tierra?

Para responder por qué los humanos no vemos la curva de la Tierra hay que partir de lo diminuta que es una persona respecto al tamaño del planeta. El espacio que ocupamos es muy reducido en comparación con los 40.075 kilómetros de la circunferencia y los 12.742 kilómetros de su diámetro.

Desde cualquier punto en el que nos ubiquemos, es imposible ver las curvas. Incluso si tuviéramos un horizonte despejado como ocurre en el mar, lo que alcanzamos a ver solo son unos cuantos kilómetros.

El doctor Dietrich Zawischa, de la Universidad Leibniz de Hannover, plantea un ejemplo que ofrece una perspectiva de la dimensión del planeta respecto al tamaño de las personas.

“Alguien se para en una pequeña isla en medio del océano y ve el horizonte a su alrededor. Toma una panorámica de 360° y fotografías normales: en todas las imágenes, el horizonte aparece como una línea recta. Por supuesto, esto se debe al hecho de que la Tierra es tan grande y, por lo tanto, la superficie del agua está tan ligeramente curvada que no podemos percibirla”, explica.

A esto, hay que agregar que la retina de los ojos no es plana, y los humanos siempre giramos los ojos o la cabeza en la dirección que miramos; por esta razón, lo que vemos se parece más a una imagen panorámica. “Lo que significa que incluso con una Tierra reducida a una milésima parte de su tamaño, ¡apenas notaríamos la curvatura!”.

En resumidas cuentas, el arco del globo terráqueo es lo suficientemente grande que a simple vista resulta indistinguible de una línea recta. El horizonte parece plano porque solo alcanzamos a ver una porción muy pequeña de la superficie de la Tierra.

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¿A qué altura se puede ver la curva?

Si nos ubicamos en un puerto y tenemos la oportunidad de ver llegar un barco, lo primero que aparecerá ante nuestros ojos será la parte alta del barco, luego surgirán las velas y por último el casco. Desde la superficie, esto puede ser lo más cerca que estaremos de constatar la existencia de la curva de la Tierra.

Pero si se tiene la oportunidad de viajar en un avión o cohete, los cálculos matemáticos indican que desde una altitud de 10.000 metros se puede ver el horizonte con una curvatura de 0,056º, pero resultaría apenas perceptible. Por encima de los 15.000 metros o hasta los 20.000 ya podría ser claramente perceptible.

El llamado avión espía Lockheed U-2 alcanza una altura de 21.330 metros, más del doble de lo que alcanza una línea aérea comercial. Quienes viajaron en él pudieron tener una vista mucho más clara de la redondez de la Tierra, además de los astronautas.