Un nueva tendencia propone el consumo responsable de los productos animales sin sacarlos de la dieta.
Entre las distintas búsquedas de una alimentación que respete la sustentabilidad económica, el cuidado del medio ambiente y la salud personales, hay un nuevo movimiento en EU que propone disminuir el consumo de productos animales como carne, pescado, lácteos y huevo y no su supresión de la dieta.
Los autollamados reducetarians se alejan de la filosofía del todo o nada que propagan los vegetarianos y los veganos y en cambio pugnan por un consumo responsable.
Ellos son conscientes que la elección de la gente en materia alimentaria tiene un impacto real en el medioambiente y en la salud personal, y su modo de ver la solución no carece de lógica: las propuestas radicales que eliminan la ingesta de productos animales -como los vegetarianos o los veganos- son desalentadoras para la mayoría de la población, en cambio impulsar la disminución permite que las personas mantengan en la dieta sus alimentos preferidos al tiempo que se sienten incluidos en un movimiento que favorece al planeta y a la salud personal.
Este movimiento surgió en EU y ha ganado adeptos entre quienes no pueden o simplemente no quieren eliminar de su dieta la carne pero saben que su consumo está directamente relacionado con un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares. Al mismo tiempo, buscan un estilo de vida más saludable que favorece al medioambiente al reducir la ?huella de carbono? y libra a millones de animales del sufrimiento.
Los reducetarians han sido bien recibidos por movimientos similares como los Meat Free Mondays. En su página web (aquí) brindan algunas sencillas estrategias para disminuir la ingesta de carne, tanto roja, como de aves, peces y mariscos.