Interamna Lirenas, una ciudad situada entre Roma y Nápoles, desafía las narrativas históricas sobre el declive del Imperio Romano. Investigadores han revelado descubrimientos sorprendentes sobre este lugar.
La ciudad perdida de Interamna Lirenas, situada entre Roma y Nápoles, desafía las narrativas históricas sobre la caída del Imperio Romano. Investigadores de la Universidad de Cambridge han revelado descubrimientos sorprendentes, como un teatro techado, mercados y un puerto fluvial. Estos hallazgos ponen en entredicho lo que se conocía sobre el declive de la Italia romana.
Este sitio histórico actualmente descansa en una serie de campos de cultivo que ofrecen pocos indicios sobre la presencia de una antigua ciudad. La investigación en este lugar inició en 2010 con el hallazgo de fragmentos de vasijas rotas, y 13 años después podemos saber que la ciudad floreció más allá del imperio y se extendió a 243.000 metros cuadrados.
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El resurgimiento de Interamna Lirenas, la ciudad perdida
Fundada en el 312 a.C., Interamna Lirenas se ubicó en territorios antes pertenecientes a Aquinum y Casinum. Su nombre, Interamna («entre ríos» en latín), y el adjetivo Lirenas («sobre el Liris») reflejan su estratégica ubicación geográfica. Con prosperidad derivada de la agricultura y el comercio, la ciudad evolucionó a municipium en el siglo I a.C. y recibió la ciudadanía romana. Julio César, nombrado «patrón» de la comunidad, marcó una era de estabilidad hasta su abandono en el siglo VI d.C., probablemente ligado a la invasión lombarda.
El equipo de investigadores, en colaboración con British School de Roma y la Universidad de Gante, publicó un estudio en Urbanismo romano en Italia, que muestra que la ciudad mantuvo su prosperidad hasta el siglo III d.C. Esto desafía la supuesta decadencia generalizada en Italia durante el declive del Imperio romano.
«Comenzamos con un sitio poco prometedor que nadie había intentado excavar; eso es muy raro en Italia», dijo el doctor Alessandro Launaro, autor y líder del proyecto.“No había nada en la superficie, ninguna evidencia visible de edificios, solo trozos de cerámica. Pero lo que descubrimos no fue un remanso, ni mucho menos. Encontramos una ciudad próspera que se adaptó a todos los desafíos que se le presentaron durante 900 años”.
El análisis cerámico reveló que el declive de la ciudad comenzó unos 300 años después de lo supuesto Un estudio geofísico también proporcionó una detallada imagen del diseño, resaltando características notables como un extraordinario teatro techado, mercados, almacenes, fábricas de cerámica y un puerto fluvial. Estos elementos indican una economía dinámica y cuestiona la percepción de un lugar en declive dependiente de bienes externos.
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El enorme teatro techado de la ciudad
El hallazgo del teatro techado destaca como uno de los descubrimientos más notables de la ciudad, lo evidencia una estructura sofisticada para su época, indicando un significativo grado de prosperidad y cultura. Con capacidad para alrededor de 1.500 espectadores, su uso continuo a lo largo del tiempo subraya la importancia de las actividades culturales y sociales, así como un gusto refinado de la población de Interamna Lirenas.
El descubrimiento de esta ciudad perdida fue posible gracias a las técnicas de radar de penetración, que ha revolucionado la forma en que arqueólogos y paleontólogos realizan descubrimientos sin recurrir a la excavación. También ha permitido explorar y descubrir con precisión sitios considerados inaccesibles, ciudades sumergidas, ocultas en las junglas o que descansan en lugares subterráneos.
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