Trasladarse en las megaciudades asiáticas no es fácil. Las personas lo hacen llevadero de diversas formas.
Las megaciudades asiáticas están al borde del colapso: la suma de un crecimiento caótico, calles estrechas, decenas de miles de forasteros y cada vez más personas con vehículo propio hacen que durante horas el tráfico se paralice todos los días. ??Dos horas de trayecto a la oficina no es nada para los ciudadanos de Bangkok (16 millones de habitantes), Yakarta (25 millones) o Manila (12 millones). Pero, ¿cómo sobreviven los asiáticos a estos atascos??
Algunas maneras rebasan la creatividad y hasta son un negocio: En Yakarta hay algunos carriles reservados para vehículos con al menos tres pasajeros, y en algunos puntos hay "viajeros" que ofrecen su compañía por un par de monedas. Entre los más populares están las madres con bebés, pues cuentan doble.
Otra opción es comer. Prácticamente en cada esquina de estas megaciudades asiáticas hay puestos de comida para llevar. Tentempiés, platos de carne u horneados, sopas con pajita listas para beber… En Bangkok se venden incluso accesorios para vehículos que mantienen caliente la comida aunque el aire acondicionado esté al máximo.
Y en caso de necesidad, cabe recordar que durante un tiempo en Manila causaron furor las "jingle bags", unas bolsas de plástico que hacían las veces de WC. También en Bangkok muchos conductores tienen preparados sus?aseos de emergencia", mientras que en Yakarta optaban por las botellas de plástico. Eso sí, siempre que el conductor vaya sin compañía.
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