Los fenómenos astronómicos han determinado las ceremonias humanas por milenios. Éstas son algunas de las formas en las que comunidades de todo el mundo celebran la llegada del verano.
Los seres humanos llevamos milenios mirando al cielo. Ya sea durante las largas noches de invierno o en los calurosos días de verano, la bóveda celeste ha sido protagonistas de hazañas de la observación humana y a partir de ella, decenas de ceremonias alrededor del mundo giran entorno al solsticio de verano. Éstas son algunas de ellas.
Midsommar
A pesar de la mala publicidad que pueda tener este evento por la película de terror dirigida por Ari Aster, Midsommar es una fiesta que se celebra en los países nórdicos y está llena de banquetes y fiestas. De acuerdo con la Encyclopedia Britannica, es probable que Midsommar tenga un origen en las deidades ugrofinesas. Esta celebración en particular se relaciona con el dios del trueno Ukko, quien controla la lluvia y por lo tanto, la fertilidad.
En Suecia en particular, el solsticio de verano trae consigo cientos de visitantes de todos los lugares del mundo. Durante esta celebración, los locales bailan alrededor de un palo llamado cruz de mayo, decorado con flores y listones de colores. Además, se organizan juegos familiares y gigantescos banquetes. Por la noche, la gente se reúne alrededor de fogatas popularmente conocidas como ‘Las fogatas de San Juan’, una asimilación entre los rituales nórdicos y los católicos.
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Stonehenge
«Stonehenge es un monumento realmente interesante», dice Jennifer Wexler, especialista en prehistoria de English Heritage. «Tiene alrededor de 4.500 años en su forma actual, pero parece tener una conexión muy importante con el sol. Fue cuidadosamente diseñado para alinearse con los movimientos del sol, lo cual es bastante espectacular si consideras cuán antiguo es.»
De todos los lugares del mundo donde observar el solsticio de verano, Stonehenge tiene una vista privilegiada. El antiquísimo sitio arqueológico lleve milenios recibiendo visitantes durante esta época del año. Lejos de la misteriosa historia del sitio, el alineamiento del sol con las estructuras que rodean a los visitantes es todo un espectáculo.
«Es realmente encantador», dice Wexler. «Las personas pueden ir, ver la puesta de sol, presenciar todo el ciclo solar, quedarse toda la noche y celebrar hasta que el sol salga».
Alaska
Después de lo que parecería una noche interminable, Alaska se llena de vida a la llegada de la luz de verano. En la ciudad de Nome, los habitantes celebran el Festival del Sol de Medianoche el día del solsticio de verano. Debido a su latitud tan cercana al Polo Norte, la llegada del verano también significa 22 horas de luz de sol directa. Impulsadas por el calor, las personas que viven en Nome comparten alimentos, pista de baile y las calles de la ciudad.
«Es muy divertido», dice Briday Green, quien ha vivido en Nome toda su vida. «Durante el invierno aquí no hay muchas cosas sucediendo, porque todos estamos atrapados debido al frío, y la única forma de salir de Nome es en avión. Así que cuando llega el momento del sol de medianoche, todos salen, estiran las piernas, se divierten y experimentan emociones.»
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