Puede ser una herramienta valiosa a la hora de acompañar a las personas a superar una enfermedad.
El arte puede ser una herramienta valiosa a la hora de acompañar a las personas a superar una enfermedad. ¿El arte cura? No hay evidencia, pero el ánimo cambia cuando las frías y estériles paredes de un hospital se cubren de obras de arte.
La iniciativa "Art@hospital" (Arte en el hospital) nació con el fin de cumplirle el último sueño a Pedro Oliveira, un joven portugués que a los 31 años sufrió leucemia y debió ser hospitalizado. "Necesito los colores de mi pinturas en estas paredes blancas si tengo que quedarme para luchar contra la enfermedad". Pero el joven entró en un coma del que no pudo volver.
Tres mujeres con mucha iniciativa gestaron el proyecto en la Argentina para "honrar su último deseo de cambiar hospitales grises en lugares cálidos y coloridos para dar esperanza". Y en tres años ya transformó las paredes de ocho hospitales, geriátricos y hogares de tránsito de niños.
La primera experiencia fue en el instituto oncológico Alexander Fleming de Buenos Aires. "Fue impresionante la respuesta de los artistas plásticos, que nos donaron 150 obras", declaró a la agencia dpa la artista plástica Andrea Schwirtz, una de las fundadoras de "Art@hospital".
"No somos curadoras de arte, recibimos todas las pinturas y tenemos la filosofía de que para cada obra encontramos un lugar en el hospital", explicó. "El lugar se vuelve completamente distinto, más alegre, con más luz, y les cambia la motivación a los enfermos y sus familiares", señaló Schwirtz.
La idea central es poner cuadros donde los pacientes y su gente querida pasa mucho tiempo, porque "los desvían a pensamientos positivo, les cambian el ánimo". Las respuestas llegaron de inmediato a través de correos de agradecimiento y nuevas donaciones de pacientes y familiares.
"Art@hospital" llevó luego a cabo un proyecto distinto, con la pintura de 30 murales en la Sala de Maternidad y Pediatría del Hospital Rivadavia porteño.
"Cuando pintas un cuadro no sabes dónde terminará luego colgado. Pero en el mural de entrada lo haces en el ámbito donde será exhibido. Durante la obra vivís y sentís el lugar. Hay una interacción con el espacio y la gente a lo largo de todo el proyecto", explicó a dpa Silvia Barbero, muralista y artista plástica.
Pintar en una maternidad fue además una experiencia distinta a todas, con madres embarazadas ingresando y luego saliendo con sus bebés recién nacidos en brazos.
Barbero también pintó murales en Cuba, en el marco de una bienal internacional de muralismo. Junto a otros tres artistas transformaron una enorme pared del Hospital Provincial Saturnino Lora en Santiago de Cuba.
"Los hospitales suelen ser lugares lúgubres, estériles, no muy personales. Con una pintura no les vas a cambiar la enfermedad ni el trabajo duro en el ámbito de la salud, pero se puede generar un efecto distinto, como una especie de oasis, casi terapéutico", señaló la muralista argentina.
Tampoco cualquier obra de arte encaja en un hospital. Se busca una paleta de colores armoniosa, grata, suave. Barbero subrayó que "se evitan las temáticas violentas o provocadoras. Hay un montón de recursos para generar una sensación agradable, de bienestar, que por un segundo te saque de allí".
Para el hospital de oncología Marie Curie de Buenos Aires, "Art@hospital" ideó una colección de rosas, el símbolo de la lucha contra el cáncer de mama, que cubrieron sus paredes en diferentes colores y estilos.
Existen numerosas teorías sobre la influencia de los colores en los estados de ánimo. La cromoterapia sostiene que los colores tienen un poder curativo y ayudan a superar trastornos emocionales
De acuerdo a estas teorías, el naranja es energizante; el azul, equilibrante y armonizador; el verde, tranquilizante y esperanzador; el amarillo estimula el entusiasmo y la confianza.
"Cualquier disciplina del arte es terapéutica, apela a la esencia del bienestar del ser humano, a las emociones", destacó Barbero. Y es terapéutica tanto para el autor como el espectador, añadió.
Pacientes, médicos y enfermeras agradecen el arte en los hospitales. "Cada día cuando entramos al hospital, es asombroso cómo las paredes nos cuentan la música del arte, compartiendo los buenos y malos momentos de nuestras vidas", agradeció el directivo de una de las clínicas.