El cáncer de piel se desarrolla en las células de la piel, pero podría continuar creciendo y propagarse hasta otras áreas del cuerpo como el hígado y los pulmones. Por ello, conocer algunas señales visibles para detectarlo a tiempo previene muchas complicaciones.
Las primeras señales del cáncer de piel, son el crecimiento de bultos o irritaciones que no desaparecen en su capa superficial. Ahora bien, entre los tipos más comunes de cáncer de piel y sus síntomas principales se encuentran:
1. El carcinoma de células basales en cabeza y cuello que pueden aparecer al principio como parches pálidos en la piel, o como un bulto de color ceroso, traslúcido, que incluso deja ver las venas en el centro. Si el carcinoma aparece en el pecho, puede verse como una cicatriz café o una lesión en la piel. Cuando el cáncer llega a desarrollarse, la lesión puede sangrar o expulsar líquido que termina por convertirse en una costra.
2. El carcinoma escamoso aparece como un bulto que puede ser rugoso en la superficie, a diferencia del liso y traslúcido de los basales.
Los carcinomas de células basales o escamosas se desarrollan en áreas planas que no se ven tan diferentes a la piel sana, por eso es importante conocer bien los síntomas.
3. El melanoma es el tipo que se detecta a tiempo con mayor frecuencia pues, en su mayoría, manifiesta su presencia en la piel de modo visible. Aparece como manchas nuevas o como un cambio de tamaño o color en lunares ya existentes.
La regla del ABCD para el diagnóstico del melanoma
Este modo ayuda a identificar crecimientos anormales que pudieran tratarse de cáncer. Se basa en estos cuatro principios:
- Asimetría: lunares de forma irregular o mitades de apariencia diferente.
- Borde: un borde irregular, difuminado, puede ser señal de un melanoma.
- Color: cambios en el tono o distribución de color en todo un lunar, pueden ser una mala señal.
- Diámetro: lunares con tamaño superior a 6 milímetros son sospechosos aunque, en algunas ocasiones, el melanoma puede ser más pequeño que eso.
Aunque muchos tipos de cáncer de piel comienzan en áreas del cuerpo que están expuestas al sol, también se desarrollan en zonas ocultas, por eso es importante examinarlas. Pon atención particular en tu cara, cuello, los espacios que están entre los dedos, las palmas de las manos o las plantas del pie e incluso los ojos. Examinarte con frecuencia para detectar cualquier cambio o crecimiento inusual de manchas o lunares ya existentes es la clave para detectar y tratar el cáncer de piel a tiempo.
Factores de riesgo
Entre los principales está la exposición excesiva a los rayos de luz UV, sin importar que se trate de luz de sol natural o luz artificial, como la de una cama de bronceado. El uso de ropa con filtro solar o bloqueador de rayos UV es un factor indispensable a considerar si pasas mucho tiempo expuesto al sol.
Tratamientos personalizados: la mejor opción
Cada caso de cáncer de piel es diferente. Clínicas como Cancer Treatment Centers of America (CTCA), con cinco hospitales de Estados Unidos, disponen de amplia experiencia en el diagnóstico oportuno y desarrollo de tratamientos adecuados y personalizados. Este Centro tiene también una primera ?Oficina Concierge? fuera de los Estados Unidos de América, ubicada en la Ciudad de México. En ella, un equipo de reconocidos oncólogos trabaja de la mano con sus homólogos estadounidenses para que cada paciente reciba un tratamiento efectivo.