No, las tortugas marinas no encabezan la lista de los animales más longevos aunque sí comparten ecosistema con algunos de ellos.
Los misterios que esconde el mar son infinitos; peces abisales, arrecifes multicolor y hasta algunas de las criaturas con las apariencias más extrañas del mundo. No es sorpresa, entonces, que los océanos también sean hogar del animal más longevo que existe en el planeta. Aquí te contamos cuáles son estos organismos, empezando por el menos longevo (que aún así vive más que un ser humano) hasta los que según la ciencia podrían tener la vida más larga (y son probablemente inmortales).
Jonathan, el animal terrestre más longevo
Jonathan es una celebridad. Ya sea por su edad o por sus preferencias sexuales, esta tortuga siempre da algo de qué hablar. Aunque no tenemos una fecha exacta de cuándo nació, podemos saber que tiene al menos 190 años a partir de una foto tomada a finales del siglo XIX. La imagen retrata a Jonathan, de al menos 50 años de edad para 1886.
La razón detrás de su longevidad son los depredadores: a lo largo de su vida, las tortugas gigantes de Galápagos ponen huevos varias veces, sin embargo muy pocos embriones puedes sobrevivir debido al alto peligro que corren frente a depredadores. Más tiempo de vida significa más posibilidades de desovar y, entonces, de tener progenie. Además, el cuerpo de las tortugas tiene la capacidad de deshacerse de células dañadas que provocan lo que conocemos como ‘vejez’.
Las tortugas de Galápagos ni siquiera forman parte de los 10 animales más longevos del mundo, pero es el animal terrestre que más tiempo vive.
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Ming, la longeva almeja
Nombrada Ming por su fecha de nacimiento, la almeja de Islandia más vieja del mundo llegó a los 507 años. De acuerdo con los estudios el individuo nació en 1499, durante la dinastía Ming en China. Los científicos sugieren que está sólo es la almeja más vieja de la que tengamos registro pero que es posible encontrar organismos más antiguos de la misma especie. La almeja murió durante las investigaciones por un mal manejo de su cuerpo.
«En las aguas más frías que rodean Islandia, la almeja oceánica tiene un metabolismo más lento y, por lo tanto, crece lentamente e incluso puede vivir más de 507 años, ¡los científicos simplemente no han encontrado una más antigua aún!,” declaró la curadora de organismos invertebrados del Museo Nacional de Gales.
El antiquísimo coral negro
Usualmente, los arrecifes de coral son lugares llenos de color y vida, sin embargo este coral es el coral negro y vive en las profundidades del océano y algunos de los especímenes de la costa hawaiana han estado ahí desde hace más de 4,000 años (4,265 para ser precisas).
Ni rocas, ni plantas, los corales son animales invertebrados llamados pólipos que van multiplicándose genéticamente para cada vez abarcar más espacio y a su vez, darle más espacio a las especies que lo habitan.
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Esponjas vítreas
Parecido a los corales, las esponjas marinas son el hogar de colonias de animales. Llamadas así por su cristalina apariencia, se ha registrado que las esponjas vítreas pueden llegar a vivir más de 11,000 años.
Forever Young: El animal más longevo de la Tierra
El primer lugar se comparte entre dos invertebrados: la Turritopsis dohrnii y los organismos del género Hidra. Ambos se consideran inmortales debido a que, potencialmente, pueden vivir para siempre.
La primera es una medusa que habita las aguas del Mar Mediterráneo y es potencialmente inmortal, pues cuando están lastimadas físicamente, vuelven a uno de sus estados de maduración para regenerarse. Es decir, pueden regresar biológicamente dependiendo de las condiciones de su organismo.
Por otro lado, los pequeños invertebrados que integran el género Hidra también tienen la posibilidad de vivir por siempre. Al igual que las medusas, el cuerpo de estos organismos se regenera para no deteriorarse jamás. Este grupo de animales no sólo tiene el potencial de tener vida eterna, sino también se mantiene por siempre joven.
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