Naturaleza mágica

Cuando de diseño de escenarios para cuentos de hadas se trata, dejémosle la labor a la madre Tierra, nadie mejor que ella para imaginar y crear lugares tan grandiosos como estos.

Cuando de diseño de escenarios para cuentos de hadas se trata, dejémosle la labor a la madre Tierra, nadie mejor que ella para imaginar y crear lugares tan grandiosos como estos.

Los árboles de sangre de dragón

Isla Socotra, Yemen

En medio del océano índico se encuentra una isla cuyo clima irregular le ha dado una biodiversidad única en el planeta. Se cree que se separó hace millones de años de un súpercontinente y quedó aislada del resto de la tierra, lo que hizo su evolución completamente diferente. Durante el año atraviesa largos periodos de sequía y otros de lluvia, lo cual provoca que un tercio de sus especies de flora y fauna sean endémicas. Su especie más famosa, aunque no la única, son los árboles de sangre de dragón, que se creía eran estos animales mitológicos reencarnados. La rara salvia roja del árbol fue lo que dio origen a la leyenda.

Las cuevas de Waitomo

Waitomo, Nueva Zelanda

Este país tiene muchas maravillas naturales, pero una de las más atractivas es la cueva de tres niveles que como muchas otras, está compuesta por estalagmitas y estalactitas, pero como muy pocas, está decorada con gusanos brillantes (como comúnmente se les denomina) y que hacen resplandecer la cueva oscura. Son una especie de luciérnaga que atrae a sus presas con luz y teje una red luminosa que cuelga de la cueva como si fueran collares de perlas, ahí es donde los insectos incautos quedan atrapados. Este espectáculo surreal puede ser visto en excursiones a pie o en bote durante todo el año.

Parque geológico Zhángye

DanxiaGansu, China

La Tierra se tardó 24 millones de años en crear este maravilloso suelo multicolor compuesto de varias capas de depósitos minerales y arena roja. El reacomodo del terreno por medio de placas tectónicas y lluvia, concluyeron el trabajo artístico que ahora es un parque protegido bien cimentado con texturas y formas únicas en el mundo. En los últimos años se han construido caminos para dar acceso a los turistas, así que ya puedes visitar este terreno arcoíris cómodamente y sin problema alguno. Si prefieres lo extremo, también se organizan tours aéreos.

Salto Ángel

Bolívar, Venezuela

Es el salto de agua más grande del mundo con 979 metros de altura. Fuedescubierto oficialmente en 1937 por el explorador estadounidense Jimmi Angel (de ahí viene su nombre celestial) quien fue el primero en documentarlo después de llegar ahí con su avioneta, aunque los nativos de la región ya conocían la cascada. Quizá este lugar se te haga familiar por la película Up de Disney, cuyos protagonistas soñaban con llegar a CataratasParaíso, un sitio ficticio pero inspirado en Salto Ángel. Si tú también quieres verlo, tienes la opción de tomar un tour en avioneta o una excursión hasta el mirador, la cual no es fácil, pues atraviesa la selva venezolana.

Cuevas de hielo

Mendenhall, Alaska

El glaciar Mendenhall mide 19 kilómetros y permite a los viajeros pasear sobre él, pero lo más interesante se encuentra debajo, escondidas varios metros bajo tierra se encuentran estas cuevas que te envuelven con todos los tonos de azul. Aunque debes tener excelente condición física para entrar, lo cierto es que el acceso se ha hecho más fácil debido al calentamiento global que derrite el glaciar de manera acelerada, incluso hay bosques milenarios descongelándose. Por la misma razón, este espectáculo natural tiene fecha de clausura y ya no podrá ser visto en algunos años, si quieres ser uno de los pocos que tenga el recuerdo de esta maravilla, tienes que visitarlo pronto.

No te pierdas: Viajes que parecen imposibles