Encuentran un par de gigantes de piedra en una isla del Mediterráneo, enterrados hace 3,000 años

Como si fueran los guardianes de una antigua necrópolis, se piensa que los gigantes encontrados en Monte Prama protegían a los muertos de la civilización nurágica.

Un halo de misterio rodea a los gigantes encontrados en Monte Prama. Con el peso de los siglos, sus rostros se han deslavado casi por completo. Aún así, se distinguen rasgos fuertes y angulares, como si con una expresión severa pudieran cuidar de los habitantes de la necrópolis de Cerdeña. Incluso la datación de los arqueólogos que los desenterraron es incierta: algunos sugieren que podrían ser del 850 d.C.; otros, de hace 3,000 años.

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Centinelas de una necrópolis extensa

No es la primera vez que piezas de gran formato se desentierran en Cerdeña. Por el contrario, el sitio arqueológico se descubrió casi por error, cuando unos agricultores locales preparaban la tierra para sembrar en 1974. Al labrar el espacio, se encontraron con tumbas rectangulares y pedazos de esculturas colosales, según documenta el Museo Civico Giovanni Marongiu Cabras.

Desde entonces, no se han dejado de descubrir ruinas de una antigua civilización en la isla, al centro del Mar Mediterráneo. Con las excavaciones que se han realizado hasta ahora, resultó ser que las tumbas que encontraron los granjeros en los 70 no eran aisladas, sino que formaban parte de una necrópolis extensa.

Este complejo funerario fue construido por la cultura nurágica, que surgió en la región hacia el año 1,700 a.C. Con base en este antecedente, los arqueólogos que encontraron a los gigantes en Monte Prama, en Cerdeña, piensan que las piezas pudieron servir para ‘proteger’ a las personas enterradas ahí.

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Expresiones severas sobre bloques de arenisca

La civilización que alzó a los gigantes de Monte Prama alcanzó su auge durante la Edad de Bronce, en la Prehistoria, y eventualmente fue dominada por el Imperio Romano. Sin embargo, así como otras culturas aledañas, conservó una línea estética independiente a la pompa y lujo de Roma.

De ahí que los gigantes de Monte Parma tengan una expresión tan severa y protectora a la vez, según documenta Smithsonian Magazine:

«Los rostros de los imponentes gigantes esculpidos de la necrópolis de Cerdeña son espeluznantes: tienen una expresión casi sin emociones que recuerda la sonrisa arcaica griega. Sus ojos hundidos y sus narices bloqueadas parecen traicionar un sentimiento de protección, incluso de hastío del mundo».

Los científicos que atendieron el caso aseguran que los gigantes encontrados en Monte Prama miden, al menos, 2 metros de largo. Fueron esculpidos sobre piedra arenisca, llevan el torso descubierto y parecen cargar un escudo antiguo con el brazo izquierdo, elevado por encima de la cabeza.

De acuerdo con Dario Franceschini, ministro de cultura de Italia, este hallazgo es ‘excepcional’. Los gigantes de Monte Prama son “dos nuevas joyas que se suman a este grupo de estatuas con su misteriosa fascinación”, según dijo en un comunicado. A pesar de sus dimensiones, los científicos a cargo de la excavación piensan que fueron destruidos a propósito. Con qué fin sigue siendo un misterio.

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