¿Acaso ?Volver al futuro? dio en el clavo?

Marty McFly viajó en el tiempo hasta esta semana.

Para algunos parecerá que fue ayer. Sin embargo, la película ?Volver al futuro? se estrenó hace casi 26 años. Marty McFly emprendió un viaje con Doc Brown en su máquina del tiempo DeLorean, con destino al futuro: para ser precisos, el 21 de octubre de 2015.

Hoy les damos alcance, y también algo de la tecnología prevista en la cinta: por ejemplo, las hoverboards. Aunque aún se encuentran en sus etapas iniciales, el fabricante está por lanzar una versión actualizada para celebrar esta fecha importante. Además, un documental sobre el impacto de la graciosa trilogía de ciencia ficción, titulado ?Back in Time?, será estrenado en línea (ve un avance de la película abajo).

La visión hollywoodense del año 2015 estaba repleta de energía barata y fácil. Y aunque eso aun dista mucho de la realidad, algunas cosas no lo están tanto.

1. Hoverboards

La hoverboard de hoy todavía no son tan ágiles como la patineta aérea que el personaje de Michael J. Fox decomisó en la película. Sin embargo, la compañía Arx Pax de Los Gatos, California tiene grandes aspiraciones para su Hendo, que utiliza una tecnología basada en el magnetismo.

El ex skater profesional Tony Hawk colaboró en el desarrollo del modelo más reciente, mucho más parecido a la patineta con ruedas que la primera versión (Hawk apareció en un video viral plagado de estrellas, el cual parecía pregonar la llegada de la máxima fantasía hoverboard, hasta que se reveló que fue una broma del sitio de videos de comedia Funny or Die).

El guionista Bob Gale, quien inventó el hoverboard de ficción para la película, ha probado el aparato real. ?Fue genial montar el Hendo, porque encarna lo que tratábamos de crear en 1989?, dice Gale.

El inventor Greg Henderson señala que la verdadera innovación no es el llamativo hoverboard, sino su tecnología patentada Magnetic Field Architecture, la cual tiene el potencial disruptivo de reducir drásticamente el consumo de energía y aumentar la recuperación en desastres. La nueva estrategia de magnetismo, agregó, ?es el medio más sencillo y eficaz de separar un objeto de la Tierra y superar la fricción?.

La fricción es una de las fuerzas terrestres más costosas en términos de energía, una razón por la que menos de 30 por ciento de la energía del combustible del tanque de un auto se utiliza para impulsar el vehículo por el camino. (Lee: ¿Ya vienen las motos voladoras?)

2. Autos voladores

?¿Caminos? Adonde vamos, no necesitamos caminos?, dice Doc Brown en el sorpresivo diálogo seminal de ?Volver al futuro?.

Por desgracia, la civilización sigue dependiendo de autopistas y caminos vecinales que cada día se vuelven más congestionados.

Jack Langelaan, profesor asociado de ingeniería aeroespacial en la Universidad Estatal de Pensilvania, opina que no es sorprendente que la tecnología de los autos voladores haya demorado en llegar, pues los requisitos de ingeniería para viajar por tierra y aire son radicalmente distintos. ?El gran peligro es que, como el ?auto volador? es un híbrido, podrías terminar con algo que sea a la vez un mal auto y un mal aeroplano?, dice.

Langelaan forma parte de un equipo que ganó un desafío de 2011 patrocinado por Google y organizado por NASA, en el cual diseñaron una aeronave eléctrica de cuatro plazas que voló 322 kilómetros a una velocidad de 172 kilómetros por hora, con una eficacia de combustible promedio de 648.5 kilómetros/pasajero por galón.

Carl Dietrich, cofundador y director ejecutivo de Terrafugia, un líder en la carrera para comercializar un auto volador, informa que su objetivo final es la automatización ?cualquiera puede conducir?.

?En mi opinión, es la máxima encarnación de la libertad personal?, dijo Dietrich. ?Por eso el auto se volvió tan popular. Y el auto volador es el siguiente nivel. Creo que seguiremos soñando con él hasta tenerlo?.

Lee: El auto que viaja sin conductor

3. Reabastecimiento de combustible automatizado

Aunque los autos permanezcan en el suelo en el futuro previsible, en 2015 podríamos ver uno de los adelantos que asombraron a Marty McFly.

Husky, un líder en la fabricación de boquillas y accesorios para combustible, lanzará este año un sistema robótico de abastecimiento de combustible en el medio oeste de Estados Unidos. La bomba de gasolina no habla ni se desplaza sobre ruedas alrededor del auto para revisar sistemas, como hacía en la estación de servicio voladora de la película. No obstante, la boquilla flexible y compacta se extiende hasta el tanque de gasolina abierto del vehículo y lo rellena sin necesidad de usar las manos.

Husky, compañía de 66 años de Pacific, Misuri, se asoció con la startup Fuelmatics Systems de Estocolmo, para crear el producto, el cual fue presentado en la exposición industrial National Association of Convenience Stores, el año pasado.

Y ciertamente, el reabastecimiento robótico es muy conveniente, dijo Sten Corfitsen, fundador y director ejecutivo de Fuelmatics, en un video de demostración que Husky publicó en YouTube. ?Es más limpio. No hay que tocar boquillas sucias?, informó. ?Ofrece más seguridad por la noche. Y tal vez no te guste que bajar del auto?. (Lee: Cómo los japoneses aprovechan a sus robots)

4. De basura a combustible

En ?Volver al futuro?, Doc Brown impulsa su máquina del tiempo DeLorean con cáscaras de banana, restos de cerveza y Pepsi que recoge de la basura. Por supuesto, recibe ayuda del reactor de energía casero ?Mr. Fusion?.

El tipo de reacción nuclear que genera la energía solar ni por asomo está lista para aprovecharse en casa. De hecho, los científicos han tenido suficientes problemas para lograr la ignición de fusiones potencialmente abundantes y libres de carbono en sus sofisticados laboratorios. Mas la tecnología para convertir basura en combustible de metano ha estado disponible, comercialmente, desde hace 30 años, afirma Kristi Moriarty, analista del Laboratorio Nacional de Energía Renovable del Departamento de Energía de Estados Unidos. Se llama digestión anaeróbica y consiste en utilizar microorganismos para descomponer materia orgánica en ausencia de oxígeno.

En Kristianstad, Suecia, uno de los principales centros agrícolas de Europa, procesan ?biogás? a partir de heces de cerdo, restos de comida y otros desperdicios. La ciudad utiliza el combustible para generar electricidad y calor, y para llenar los tanques de vehículos como camiones de basura y autobuses municipales, pues la cantidad es suficiente para reemplazar, anualmente, 700,000 litros de diesel. (Lee: Basura convertida en gas)

En Estados Unidos, el vertedero Altamont de California convierte la basura en 49,210 litros diarios de gas natural licuado, con los que surte de combustible a los 300 vehículos de recolección de basura de la región.

Moriarty dijo que el circuito ciudad-basura-a-ciudad-combustible tiene sentido, porque el proceso del biogás se vuelve más eficiente, pero aún es relativamente costoso y no se ha adoptado ampliamente.

Sin embargo, transformar basura en energía tiene sentido económico en muchas partes del mundo en desarrollo. Por ejemplo, Moriarty y sus colegas se enteraron de un proyecto en Muaro Jambi, Indonesia, donde pretenden convertir desechos del procesamiento de aceite de palma en biogás, el cual redundaría en un gran rendimiento de la inversión. Dicho combustible sería tremendamente necesario para los habitantes, pues generan energía costosa y sucia con diesel. En esas comunidades carentes de energía y con disponibilidad de desechos biodegradables, el biogás ?realmente es beneficioso por donde se vea?, afirmó Moriarty.

El propio Doc Brown no habría podido provocar más entusiasmo ante las posibilidades de la ciencia. Mas los objetivos de los verdaderos innovadores energéticos de 2015 hacen que viajar en el tiempo parezca bastante trivial.