Desentierran 76 víctimas de sacrificios infantiles en Perú, enterrados hace 822 años

Docenas de víctimas de sacrificios infantiles se exhumaron en un sitio arqueológico enigmático de Perú. Es probable que muchos más sigan bajo tierra, aseguran arqueólogos.

Los arqueólogos de la Universidad de Florida quedaron perplejos. En el sitio de Pampa La Cruz, ubicado en el distrito de Huanchaco, se encontraron 76 esqueletos de niños chimú. Lo más probable, según la posición en la que fueron enterrados, es que hayan sido víctimas de sacrificios infantiles en Perú.

No es la primera vez que se encuentran entierros de este estilo en el yacimiento. Por el contrario, corren décadas de investigación y exhumaciones masivas. Hasta ahora, siguiendo los registros locales, se han encontrado más de 323 ejemplos de sacrificios infantiles en la zona. Todos coinciden en un mismo factor: al morir, se les extrajo el corazón.

Esto es lo que sabemos.

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A corazón abierto

Originalmente, los arqueólogos pensaban que la zona no contaba con restos de sacrificios infantiles. Sin embargo, se encontraron con exactamente lo contrario, según explica Gabriel Prieto, profesor asistente de antropología en la Universidad de Florida que dirige las excavaciones en Pampa La Cruz.

Los restos de niños chimú encontrados en el sitio presentan claras evidencias de cortes a la altura de la caja torácica. Esto sugiere, de acuerdo con los investigadores, que les extrajeron el corazón. Hasta ahora, el número de víctimas supera las 7 decenas.

«Fueron enterrados en una posición extendida, con los pies hacia el este», dijo Prieto a Live Science en un correo electrónico, «[…] encima de un montículo artificial».

Aún no está claro porqué se ubicaron con esa posición, admite el equipo de investigación, ni la razón por la cual se realizaron tanto sacrificios infantiles en este yacimiento de Perú. La mayoría aplastante de cadáveres correspondieron a niños, que vivieron entre los años 1000 y 1200 de nuestra era.

Los investigadores están convencidos de que el número de muertes ceremoniales sobrepasa el millar de víctimas. Por lo cual, la escala de muertes abrumó a los científicos involucrados en la excavación.

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