Una cría de hipopótamo se ha vuelto viral, su nombre es Moo Deng y aquí te contamos su historia (y la de su especie).
Entre frases que nunca creímos decir, seguramente se encuentra ‘una hipopótamo ha conquistado el mundo’ pero Moo Deng lo logró. Con tan sólo un par de meses de nacida, cría de hipopótamo pigmeo (o enano) representa uno de los últimos individuos de su especie. Redonda, joven y rosa, su ternura ha logrado atravesar fronteras desde su natal Tailandia.
De acuerdo con algunos expertos, son sus rasgos infantiles y redondos lo que nos hacen empatizar con animales como esta hipopótamo y considerarla ‘tierna’. Esta es una estrategia evolutiva que ha permitido que algunas especies conserven sus rasgos infantiles o de cachorros para apelar al instinto protector de otros animales.
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Los hipopótamos pigmeos en peligro
También conocidos como hipopótamos enanos, estos mamíferos son originarios del occidente de África y se encuentran distribuidos únicamente en 4 países. Debido a su naturaleza nocturna, los parientes africanos de Moo Deng no pudieron ser estudiados por la ciencia hasta la década de 1840. Por lo mismo, las labores hacia su conservación se han visto tardías.
Al día de hoy, se estima que existen aproximadamente 2,000 ejemplares en vida silvestre. Esta pérdida poblacional encuentra su raíz en la rápida desaparición de los hábitats que son los hogares de esta especie.
Moo Deng y la luz al final del túnel
El nombre de Moo Deng viene ‘cerdo saltarín’ en tailandés y refleja su personalidad alegre y dinámica. Desde su nacimiento en julio de este año, personas de todo el mundo han acudido al zoológico Khao Kheow de Tailandia para conocer a esta celebridad del internet.
A pesar de que las condiciones de conservación silvestre no son las más óptimas, hay buenas noticias: los hipopótamos pigmeos son fáciles de reproducir en cautiverio y Moo Deng es un ejemplo de esta posibilidad. Sin embargo, se necesita una acción real para poder garantizar la supervivencia de la especie.
«Sería lindo si las personas pudieran extender su interés en esta pequeña cría a toda la especie,» explica David Barash, especialista en biología evolutiva.»Que nos parezca tierna es una cosa pero intentar que su popularidad nos ayude a salvar su especie es distinto. No sólo se trata de ella, sino de todos sus parientes,» concluye el profesor emérito de la Universidad de Washington.
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